Sol Cesar y La Tana - Pasó poco más de un mes de la vigilia bajo la lluvia que dejó demostrada la falta de representatividad de un Senado que hizo oídos sordos al pedido popular, poniendo un freno a la legalización del aborto seguro y gratuito. Las largas jornadas de debate que se vivieron en las calles de nuestro país vinieron a desmentir a gritos los históricos argumentos de quienes en pos de una moral conservadora, encubren el gran negociado basado en la apropiación de nuestros cuerpos.
Cuando nos preguntamos por qué tanto énfasis en seguir asesinando alrededor de 450.000 mujeres por año en abortos clandestinos, descubrimos grupos poderosos con grandes intereses detrás. En este sentido, la institución-iglesia es fuertemente cuestionada, extendiendo el reclamo feminista a toda la sociedad: Se exige Educación Sexual Integral laica y obligatoria en todos los establecimientos educativos, así como la separación real de la Iglesia y el Estado.
En estos meses que nos esperan hasta poder discutir nuevamente el aborto legal en el Congreso, la Iglesia y el Estado patriarcal ven que han perdido terreno y se proponen dar batalla imponiendo la desinformación, haciendo uso de todas las herramientas que tienen a su alcance.
“Que las normas no dejen de lado principios discriminatorios no debe obligar a todos a converger en postulados reñidos con las propias convicciones. El respeto debe garantizar la convivencia. Los denominados nuevo colectivos no pueden imponerse violentando a aquellos miembros de la misma sociedad que no los acepta como modelo para sus hijos. Una vez más, pareciera que ciertos grupos intentan imponer ideologías disfrazadas de progresismo, amparándose en una pseudodefensa de la diversidad y, al hacerlo, precisamente vulneran la diversidad de pensamiento.”
Esto puede leerse este martes 11 Septiembre 2018, en uno de los medios de comunicación más leídos del país. La Nación decide que es hora de dejar bien clara su postura en torno al debate de la implementación (y modificación) de la Ley de Educación Sexual Integral. Ninguno de sus párrafos nos sorprenden, conocemos las tendencias del periódico, pero no por falta de asombro podemos seguir avalando y naturalizando el periodismo hegemónico, generador de las opiniones que los diferentes brazos del sistema necesitan para sustentarse.
Este periodismo basado en la desinformación, que juega con el respaldo del real adoctrinamiento que sufrimos a diario desde hace siglos, nos lleva ahora a cargar con una mujer muerta cada 18 horas, con más de 114 compañeras travestis asesinadas en lo que va del año y pibxs desaparecidxs en cada barrio del país por las redes de trata.
Respecto a la reforma de la Ley de Educación Sexual Integral, La Campaña Nacional por el Derecho al Aborto Legal, Seguro y Gratuito, manifestó:
“Consideramos fundamentales las modificaciones propuestas en el dictamen firmado en el día de ayer con amplia mayoría en ambas comisiones (Educación y Mujer, Familia, Niñez y Adolescencia) a saber: 1. La modificación del artículo 5 de la Ley 26.150 que elimina las arbitrariedades institucionales a las que da lugar. 2. La modificación del artículo 1 que incluye en la definición de integralidad la perspectiva laica y científica. 3. Establecer de orden público y no de adhesión la ley 26.150 lo que implica la discrecionalidad de las provincias respecto a su aplicación y su garantía de obligatoriedad. 4. La reforma del artículo 2 que incluye leyes sancionadas con posterioridad: Ley de Identidad de Género (26.743) , Matrimonio Igualitario (26.618) Ante el tratamiento en el Recinto exigimos: 1. La incorporación en el artículo 2 ďel Fallo FAL y el protocolo de ILE. 2. Incorporar en el artículo 3 el inciso f) Garantizar la formación gratuita, permanente y en servicio a docentes, personal no docente y equipos de conducción de las instituciones educativas de todos los niveles y modalidades, conforme a las exigencias de dicha ley. 3. Supervisar desde el Estado y monitorear desde la sociedad la implementación de la Ley en instituciones educativas de los niveles inicial, primaria, secundaria, educación de adultos y superior no universitario y modalidades de gestión estatal, social, privada, laica y confesional. 4. La incorporación de la perspectiva de géneros y disidencias en la definición de integralidad.”
Eso, que para ellos es “imponer una ideología” para nosotrxs son nuestras identidades y nuestros derechos, es la posibilidad real de conocer y decidir cómo vivir una vida un poco más digna. Precisamente exigimos que nadie dependa de la buena voluntad de las familias, ni del nivel de religiosidad de las escuelas: Todxs tenemos derecho a información accesible y medios gratuitos para ser realmente libres de decidir.
La ESI, la separación de la Iglesia y el Estado y el aborto legal no son la solución, pero si avances gigantes en esta lucha contra el patriarcado. En un país donde constantemente son vaciados por el Estado los espacios seguros para las sobrevivientes de violencia machista, donde después de dos jornadas históricas se decidió ignorar a lxs muertxs por abortos clandestinos, es más importante que nunca seguir luchando para brindar conocimientos y herramientas reales a las futuras generaciones.
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