En esta entrega de #ArgentinaenCuestión, nueva sección de Resumen Latinoamericano y Revista Resistencias, entrevistamos a Rafael Klejzer, Secretario General de la seccional capital de la Central de Trabajadores de la Economía Popular (CTEP) y referente del Movimiento Popular La Dignidad (MPLD) que integra de cara a las elecciones el Frente Patria Grande.
Por David Pike
¿Cómo estás viendo el final de este periodo del gobierno de Macri?
El proyecto que encarna Macri es la expresión política de un proyecto regional conservador, con la manifestación más vil y canallesca del capitalismo, donde me parece que se dieron tanta rosca que ya no es un gobierno de ricos, sino de 5 hijos de puta que se garantizan los negocios. Acá hay unos pocos sectores de la economía que han ganado, las empresas ligadas a la energía, los bancos y los supermercados. El capital productivo, inclusive las grandes empresas nacionales, terminan perdiendo en este periodo, por supuesto que no en los términos de como sufre el pueblo. Es una política del saqueo que genera los dólares que estos tipos necesitan para la fuga. Eso que no producimos nosotros acá, viene en forma de préstamo, lo pagamos nosotros y los tipos se la llevan.
Esa rueda que genera desocupación, miseria, perdida de soberanía, es difícil desmontar de un día para el otro, independientemente del gobierno que venga. Por eso es importante no solamente el frente anti-macri, sino también el frente anti-neoliberal porque se necesita un pueblo movilizado para exigirle a los gobiernos que rompan relaciones con el FMI.
Este frente anti-neoliberal va de la mano de la discusión de cuál es el bloque histórico que necesita nuestro país para transformar radicalmente parte de su estructura económica y de propiedad. La tan mentada unidad en la calle se realizó, los movimientos populares junto con el movimiento obrero estamos teniendo buenos puentes. El movimiento obrero, los trabajadores de la economía popular, el feminismo, ciertos sectores de la política relacionada con algunos intendentes del conurbano que quieren hacer las cosas bien y alguna expresión política que rompa con la tradición neoliberal, sintetiza ese bloque histórico que necesitamos.
¿Qué esperas que pase tras las elecciones?
Si el 10 de diciembre nosotros no estamos movilizados [día en el que empieza un nuevo periodo de gobierno], los gobernantes no creo que tengan la fuerza o la voluntad política de romper relaciones con el FMI y los mercados internacionales, lo cual es la única condición para la soberanía y la autonomía para el desarrollo.
Es una gran pelea que tenemos que dar, entendemos que la política tradicional no lo va a hacer. Fijate como resolvieron la crisis de representación política, se bajó Cristina [Fernández de Kirchner], lo habrá charlado entre 5 o 6 personas y lo puso a Alberto [Fernández]. En ningún momento hubo un debate político con los sectores populares de quien debían ser los candidatos. La política sigue resolviendo sus problemas con la política, los trabajadores no estamos convocados a participar de un proceso político. Por lo cual, si bien vamos a militar la campaña de Cristina y Alberto, no damos ningún cheque en blanco.
Tenemos que discutir el poder en la Argentina. Un programa político de salida, tenemos que desengancharnos de esa lógica capitalista de acumulación. Sabemos que es difícil, que no están dadas las condiciones, ni en la pelea por el sentido, ni en la correlación de fuerzas, pero si no te lo proponés salís del ámbito político. Nosotros entendemos la economía popular como una economía postcapitalista, y no de subsistencia, por eso tenemos un gran aporte que hacer.
Hay que discutir la distribución de la riqueza, pero ¿quién la discute?, ¿quiénes estuvieron en la resistencia estos años?, ¿los partidos o el movimiento de trabajadores? Ahora aparecen estos tipos y vale más un tweet de algún famoso que los programas históricos. Son las reglas de juego, nosotros no nos supimos imponer.
Ustedes pusieron su esfuerzo en que la candidatura a la presidencia sea para Cristina Fernández de Kirchner y finalmente, el candidato es Alberto Fernández ¿Qué caracterización haces sobre la fórmula Fernández-Fernández?
La política no ve a los trabajadores de la economía popular ni a sus organizaciones sindicales, estamos afuera de la lógica de la política liberal. Acordate que la legalidad de la CTEP, Cristina la dio en el último día de su mandato. Ellos están pensando en un Estado de Bienestar, de pleno empleo, que ya no existe. Somos sujetos de un plan social. De entrada, le dijimos: nosotros el 10 de diciembre estamos movilizados, contra Clarín, pero también para que vos nos veas.
Estamos infinitamente en mejores condiciones para pelear, sacando a Macri que si se queda. Nosotros tenemos que plantearnos escenarios donde avance nuestro sector y el conjunto del movimiento obrero.
Tampoco es el mismo piso Cristina Kirchner presidenta que Alberto Fernández.
No es lo mismo. Pero tampoco Cristina se comprometió a darnos una carta de derechos así que es el mismo piso. A nosotros lo que nos entusiasmaba es que el poder odia a Cristina. Los fondos buitres, el FMI y los grupos concentrados de poder, odian a Cristina. Y si todo ese bloque dominante odia a Cristina, por algo es. Nosotros entendíamos que era un piso para poder desarrollarnos y de ahí, avanzar con la propia voluntad.
Alberto tiene que ganar y demostrar, esperemos que escuche más al pueblo que sufre que a los fondos buitres. En la medida que nos escuche a nosotros, al pueblo, le va a ir bien.
¿Qué no los hayan escuchado es reflejo de la correlación de fuerzas?
Tenemos el control de la calle, tenemos poder destituyente pero no constituyente, tenemos la fuerza para hacer daño pero no tenemos para imponer una política de salida.
Sin embargo, parece que Macri se va a quedar hasta que finalice su mandato.
Porque la gente no quiso, no porque no lo planteamos, saben que se van con las elecciones. Claro que hay dirigentes a los que les es más cómodo una salida electoral que ponerse al frente de una pelea importante. Se discutió mucho en los barrios y la gente sabe que se va, y lo saben porque en el 2015 lo votaron.
¿Qué opinás de las críticas de Alberto Fernández sobre la Ley de Medios?
Se equivoca. Hay que nacionalizar el caño por donde pasa toda la información que es el caño de fibra óptica y las empresas que quieran pasar por ahí su ideología del mal van a tener que pagar un canon y en la medida que no cumplan las leyes no van a poder pasar su información. Ahora nosotros creemos que Alberto no lo va a hacer.
La Ley de Medios era un avance concreto.
Grabois y el Frente Patria Grande están planteando que hay que pasar a comisión a todos los jueces federales, porque son los tipos que tiran para atrás las leyes que afectan intereses. Ya es momento de que los jueces lo elijamos nosotros que haya un sistema de participación de la gente.
¿En caso de que se vaya Macri, que políticas crees que son necesarias discutir?
Queremos discutir políticas públicas. Los derechos de los trabajadores de la economía popular son políticas públicas estatales, entonces nosotros estamos discutiendo todo el tiempo con el Estado. No es la misma mediación que hacen los sindicatos tradicionales, sino que es una nueva mediación y para que nosotros tengamos derechos tenemos que hacer leyes y eso nos obliga a politizar a nuestro sector.
Para eso necesitamos un bloque de fuerza que discuta un programa de políticas públicas nacionales porque nosotros solos no lo podemos resolver y el instrumento para llevar adelante la pelea es el Sindicato Único de Trabajadores de la Economía Popular, donde quepamos todos e inmediatamente después entremos en la CGT. Ese es el bloque de fuerza que nos permite a nosotros salir a discutir con el próximo gobierno.
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