Por Agustina Machiavello e Ignacio Mattos
Entrevista a Alina, presidenta del Centro de Estudiantes del Instituto de Educación Media Dr. Arturo Oñativia de Salta.
¿Cómo empezaste a relacionarte con la política estudiantil de tu provincia Salta?
Siempre milité, en mi familia fue normal defender lo que uno cree. Tanto por el lado feminista, como por el lado político-social. Caí de casualidad en el colegio, me enteré cómo funcionaba: que es pre-universitario, dependiente de la Universidad Nacional de Salta (la única universidad pública que hay en esta provincia) con lo cual todo se maneja diferente. Tenemos suerte porque en todo Salta, es el único colegio secundario que tiene un centro de estudiantes que actualmente funciona. Este colegio también tiene una sede en Tartagal que tiene un centro de estudiantes, pero actualmente no funciona y de hecho estamos en contacto con los pibes y las pibas de allá para ponerlo en funcionamiento.
Acá entramos en conocimiento de la existencia de como mucho 3 centros de estudiantes que fueron dejando de funcionar por una cosa que nos preocupa a todos y todas: que es la despolitización que se vive. A nivel nacional y provincial, la falta de esa consciencia o la negación con la política. Como centro de estudiantes hacemos énfasis en difundir y promover que la política no es mala, hay que aprender de ella. La política está indispensablemente en el día a día.
¿Qué acciones o luchas se están llevando a cabo?
Nuestro colegio, en este último año especialmente, se está moviendo por muchas cuestiones sociales, como por ejemplo el aborto. El centro de estudiantes tomó una postura muy difícil, debido a que es inevitable el hecho de que Salta es una provincia conservadora. Además diferentes medidas sociales como el boleto estudiantil, o el pase libre. Que ya no es libre, porque en el 2017 a fin de año SAETA, que es la empresa de colectivos de acá lanzó un comunicado, donde restringía el pase libre a tan solo 100 boletos por mes por estudiante, cuando anteriormente era libre. Hicimos movilizaciones por este tema y se formó un colectivo de estudiantes, donde reivindicamos más que nada a los pibes y las pibas de la noche de los lápices. No sé logró nada hasta el día de hoy, seguimos luchando por que caigan esas restricciones. Esto es una de las consignas de la toma del rectorado, que sigue hasta hoy.
La movida social-estudiantil recién ahora se está empezando a despertar. Participamos del primer foro federal de centros de estudiantes en Formosa hace un mes. Nos sorprendió que los pibes y pibas de diferentes provincias comenten que en las mismas existen más de 100 centros, o que por provincias formaban federaciones de centros de estudiantes. Fue un gran logro haber podido viajar, mostrar nuestra realidad, y conocer pibes y pibas.
A raíz de esto, ahora está la Coordinadora de estudiantes salteños, conformada por secundarios. Que nació en consonancia con la campaña del aborto, era una coordinadora de pibes y pibas que se pronunciaban a favor del proyecto de ley. Se gestó un espacio de pibes y pibas que tienen ganas de moverse. Ahora por lo que nos estamos moviendo es por conformar centros de estudiantes por toda la provincia.
El tema de las sanciones, o que se hayan expulsado estudiantes de sus instituciones, tiene que ver con las manifestaciones a favor de la interrupción voluntaria del embarazo. El solo hecho de llevar un pañuelo en tu mochila te hacía parecer un bicho raro en Salta.
En la memoria y lo que viene
El 17 del pasado septiembre que se hizo la marcha nacional por la Noche de Los Lapides, acá fue organizada por la coordinadora de estudiantes donde los pibes y las pibas contaron como se sentían, que están formando parte de la lucha actual, y como nos sentimos parte de la lucha que se vivió hace 42 años. Aparece siempre la necesidad de seguir luchando y estar en las calles.
