A siete meses del asesinato de Sergio Jasi su familia marchó exigiendo justicia. Nucleada en la Marcha Nacional Contra el Gatillo Fácil, la jornada estuvo acompañada por familias de otras víctimas de la violencia policial y organizaciones políticas y sociales.
Sergio fue masacrado a golpes. El veintiséis de abril de 2019 se encontraba caminando en la calle cuando le dió un brote psicótico, creía que alguien lo iba a matar y se encerró en la casa de unos vecinos, estos llamaron a la policía que como respuesta lo molió a golpes. Jasi ya estaba inconsciente producto de la golpiza, aún así los agentes lo llevan hasta la comisaría en patrullero y allí su suegra que había sido alertada de la situación lo ve desplomarse en el piso. Fueron los gritos de auxilio de ella los que hicieron reaccionar a la policía para que lo atendieran en el hospital, pero cuando llegan la víctima se encontraba sin vida.
Uno de los policías que asesinó a Jasi, fue también autor del crimen de Diego Cagliero meses más tarde, se trata de César Canstatt. Las familias gracias a la organización que llevan adelante pudieron dar con este dato dónde manifiestan la sistematicidad del accionar disciplinador de las fuerzas para con el pueblo y sobre todo les jóvenes de los barrios populares.
Diez policías son los responsables de la muerte de Sergio Jasi, su compañera, Laura, es quien ahora encabeza la lucha por justicia y exige la condena de todos los implicados.
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