Conferencia de prensa de la Campaña por el Aborto Legal, Seguro y Gratuito
En la puerta del Ministerio de Salud de la Nación, la Campaña por el Aborto Legal, Seguro y Gratuito manifestó su repudió a la violación de los derechos humanos que implicó la cesaria realizada a la niña de 11 años en Tucuman, quien fue violada por la pareja de su abuela, quedó embarazada, pidió por un aborto y, a pesar de todo esto, fue obligada a ser madre.
Consideraron que todos los mecanismos burocráticos que dilataron la gestación de un embarazo de 19 hasta 25 semanas, fueron puesto al servicio de la tortura y pusieron en riesgo la vida de la menor.
Recordaron el fallo FAL que permite abortos en casos de violación o cuando pone en riesgo la vida de una niña, madre o persona gestante y subrayaron que el único requerimiento necesario es el consentimiento informado.
La decisión de ignorar la voluntad de la niña y violar la ley fue tomada desde el Sistema Provincial de Salud (SiProSa), es decir, por el gobernador y ex ministro de salud, Juan Manzur. Por eso, desde la Campaña pidieron su renuncia, junto a los ministros de la provincia, Rosanna Chahla, de salud y Washington Navarro Dávila, de defensa y al titular del SiProSa, Gustavo Vigliocco. A la vez, exigieron la implementación del Protocolo de Interrupción Legal del Embarazo en toda la provincia.
La Campaña hizo hincapié en las autoridades del Hospital Eva Perón de la Ciudad de San Miguel del Tucumán rechazando la objeción de conciencia institucional. En este hospital, todos los profesionales se abstuvieron de intervenir por lo que llamaron a médicos de instituciones privadas para llevar la práctica adelante, por lo cual recordaron que aquellos que se hayan negado a cumplir con sus obligaciones podían ser sancionados por incumplimiento de sus obligaciones. Concluyendo en el pedido de separación de su cargo por tratos crueles a la médica pediátrica de neanotología del hospital, Elizabeth Ávila.
Fotos: Martín Santos
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