El pasado martes, 37 estudiantes de la escuela Nº14 “Ernesto Padilla”, del Distrito Escolar 7, se intoxicaron tras ingerir alimentos en el establecimiento. Las familias de la cooperadora denunciaron el hecho a la Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología (ANMAT) y a la Agencia Gubernamental de Control (AGC) y exigieron respuestas inmediatas. Luego de desayunar y almorzar los alimentos que les sirven en el colegio, muchxs chicxs comenzaron con vómitos, diarrea y malestar estomacal. Tras lo sucedido, la Cooperadora informó a la empresa responsable, Lamerich S.A., la cual envió controles bromatológicos, pero la información se mantuvo en una auditoría interna de la firma. Desde la Cooperadora Ernesto Padilla señalaron que “Se resolvió que momentáneamente no se entregaran alimentos congelados y/o prefabricados. Se enviará la comida directamente desde la empresa Lamerich. Entendemos que al haber casos en otras escuelas no sería un problema de la cocina particularmente”.
Tal como señalan en el comunicado, no es la única escuela afectada ni es la primera vez que docentes y familias denuncian alimentos proporcionados por las empresas concesionarias en mal estado, vencidos y hasta con gusanos. Cabe recordar, sólo por dar un ejemplo, que en agosto del año pasado en la escuela pública Francisco de Vitoria de Villa Crespo, más de 30 estudiantes también sufrieron intoxicación instantáneamente tras ingerir alimentos en la institución.
Todas las miradas apuntan al gobierno de Horacio Rodríguez Larreta, quien en los últimos años tercerizó todos los servicios escolares, dejando la limpieza y la alimentación en manos de empresas privadas como la ya mencionada Lamerich S.A. Además, gracias a los reclamos de lxs estudiantes y sus familias, son conocidas las pésimas condiciones edilicias en las que se encuentran las escuelas públicas, y la indiferencia y el poco compromiso con el que el gobierno de la ciudad maneja estos asuntos. Queda demostrado, una vez más, que la política de ajuste que mantienen desde la gestión de Cambiemos en Capital Federal perjudica a la educación pública, pero, también recae directamente sobre la salud de lxs estudiantes y docentes.